6 de junio de 2010

La caja cerrada

La caja cerrada
Por Sugel Michelén


El naturalismo clama ser la única explicación racional del origen y existencia del universo, a la vez que desecha la fe cristiana como una creencia supersticiosa e irracional.
El naturalismo en si no reclama nada. La naturaleza sólo se puede explicar racionalmente mediante las ciencias naturales. Mediante una creencia no se puede explicar nada




Pero antes de responder a sus acusaciones debemos conocer, aún sea grosso modo, los postulados principales de esta cosmovisión. La teoría esencial del naturalismo es que nada existe fuera del orden natural que intervenga en la naturaleza.
Esto no es una teoría, es una realidad. No existe nada sobre natural. Existen muchos fenómenos que aún no se pueden explicar, que aún no sabemos a qué se deben, pero esto no significa que sean sobre naturales.



Todo cuanto existe en el universo puede ser explicado sin tener que recurrir a ninguna fuerza o inteligencia sobrenatural.
Muchas cosas del universo todavía no tienen una explicación. La ciencia está haciendo casi a diario nuevos descubrimientos, y cada nuevo descubrimiento viene acompañado con nuevas interrogantes. ¿Llegará alguna vez el momento en que lo sepamos todo? Esto tampoco lo podemos saber



Para los naturalistas el universo es algo así como una caja cerrada, cuyo origen y funcionamiento se explican totalmente por los elementos contenidos dentro de ella. Fuera de esa caja no existe nada más.
El universo no se formó de cosas que estaba dentro de él, esto es un absurdo. El universo tuvo un comienzo, y la ciencia cuenta con un modelo de cómo se formó el cosmos, y que es aceptado universalmente. Sabemos cómo y cuando se formó la materia. Este modelo, el mal llamado Big-bang no necesita de seres sobre naturales para su explicación



Como dice el filósofo William Halverson: “El mundo es… como una máquina gigantesca cuyas partes son tan numerosas y cuyos procesos son tan complejos que nosotros somos apenas capaces de adquirir sólo un entendimiento parcial y fragmentado de cómo éste funciona. En principio, sin embargo, todo lo que ocurre es explicable, a final de cuentas, en términos de las propiedades y relaciones de las partículas de las cuales la materia está compuesta.”
La ciencia, en el estado de avance que se encuentra en la actualidad, puede explicar muchas cosas, pero sin embargo quedan muchas interrogantes. Fe es creer, no saber. Creer no es racional. El verdadero conocimiento sólo se adquiere mediante la razón, y no mediante la creencia en algo, que puede o no ser cierto.



Ahora bien, aunque los naturalistas se ufanan en la racionalidad de su teoría, y rechazan la fe como mera creencia religiosa, lo cierto es que sus conclusiones descansan en presuposiciones que no pueden ser probadas científicamente y que deben ser aceptadas por fe.
Los naturalistas no tienen que ufanarse de nada, ya que todo tiene una explicación racional. La fe o la creencia en algo no evidencia nada. Cosas esotéricas pueden ser aceptadas por la fe. Esto es una opción personal.




He aquí algunas. En primer lugar, que sólo la naturaleza existe (¿cómo saben eso con certeza?).
La naturaleza es materia y energía, que en el fondo son lo mismo, sin eso no funciona nada. La energía se formó junto con el tiempo y el espacio. La materia se formó posteriormente. Algo inmaterial o sobrenatural no puede crear materia.




En segundo lugar, que la naturaleza es un sistema materialista, es decir que todo puede ser explicado en términos de causas materiales, incluyendo la memoria, los pensamientos, las creencias y las inferencias lógicas (el naturalista se ve obligado a negar la existencia del “yo consciente e intencional” y explicarlo como una “ilusión de la neuronas cerebrales, que te hacen creer que eres una persona y no una máquina”).
La memoria es una función del cerebro, además ya se ha logrado crear memorias artificiales, que no se olvidan de nada. Todos los computadores las tienen y para esto no fue necesario un ser superior, lo hizo el hombre con su inteligencia y gracias a la ciencia.




En tercer lugar, que la naturaleza es un sistema que se explica sólo sin tener que recurrir a causas sobrenaturales.
Esto sí es cierto.



Y en cuarto lugar, que la naturaleza es un sistema determinista, es decir, que todos los eventos son determinados por causas físicas, incluyendo las creencias y pensamientos humanos.
Los pensamientos son funciones del cerebro y gracias a estas funciones podemos creer en cualquier cosa


Ninguna de estas creencias es plausible de ser probada científicamente; todas deben ser aceptadas por fe y solo por fe.
Lo físico y lo material, que es la naturaleza no se aceptan por fe, son conocimientos reales. Y esto no tiene nada que ver con fe. Las cosas reales no se aceptan por fe. La ciencia no dice yo creo esto o aquello, los científicos establecen teorías que se basan en conocimiento, experiencias, en observaciones, en deducciones lógicas y si es posible en la experimentación.



aagb Junio 2010

2 comentarios:

Alexánder dijo...

“Toda ciencia del pasado [...] que excluye a priori la posibilidad de diseño o creación deja de ser un medio de buscar la verdad, y se convierte en sierva (o esclava) de una doctrina filosófica problemática: el naturalismo.” (Origins Research.)
“Es un mito [...] que Charles Darwin resolviera el problema del origen de la complejidad biológica. Es un mito que nosotros tengamos una comprensión cabal, o siquiera moderada, del origen de la vida, o que las explicaciones correctas solo hagan referencia a supuestas causas naturales. Desde luego, estos y otros mitos del naturalismo filosófico gozan de cierto prestigio. Uno no habla con demasiada dureza de ellos entre gente educada. Pero tampoco deberíamos aceptarlos a ciegas.” (Origins Research.)
“Muchos científicos admiten en privado que la ciencia no es capaz de explicar el origen de la vida. [...] Darwin jamás se imaginó la inmensa complejidad que existe incluso en los niveles más básicos de la vida.” (Darwin’s Black Box.)
“La evolución molecular no tiene fundamento en la autoridad científica. [...] Hay aseveraciones de que tal evolución ocurrió, pero ni una sola de ellas cuenta con el apoyo de experimentos o cálculos pertinentes. Como nadie conoce la evolución molecular por experiencia directa, y como no hay ninguna autoridad en la cual basar las afirmaciones de conocerla, puede decirse francamente que [...] la aseveración de la evolución molecular darwiniana no es más que una fanfarronada.” (Darwin’s Black Box.)

Alexánder dijo...

La teoría de la evolución es sin duda el sueño de un jugador. ¿Por qué? Porque según el evolucionista, esta gana a pesar de que las probabilidades de perder sean astronómicas.
Robert Naeye escribe: “Dado que la evolución es mayormente un juego de azar, cualquier suceso pasado aparentemente insignificante podría haber ocurrido de manera algo distinta e interrumpir nuestro proceso evolutivo antes de que el ser humano evolucionara”. Pero no, se supone que creamos que toda casualidad salió bien, millones de veces. Naeye admite: “La larga serie de atolladeros hace patente que la aparición de la vida inteligente es una cuestión mucho más difícil de lo que los científicos pensaban. Hay probablemente otros obstáculos más con los que los científicos todavía no se han tropezado”.