Por
enésima vez: ¿Realmente existió Jesús?
Por alguna
razón me interesa mucho, si el mito Jesús tiene un fundamento histórico. Aún si
una persona cómo esta haya existido, esto naturalmente no la conferirá
credibilidad a la condición de hijo divino de Dios/parte de Dios, tampoco los relatos
bíblicos sobre él. Al fin y al cabo muchos mitos se basan en personas
históricas, a quienes posteriormente se les atribuyo milagros, divinidad y
cosas similares. Así por ejemplo “John Frum”, figura destacada perteneciente a cultos-cargos
pacíficos, movimiento religioso, que perfectamente podría basarse en un soldado
norteamericano real.

Naturalmente
los cristianos están inmensamente interesados en la historicidad de Jesús,
puesto si se puede m9ostrar, que una perso9na así haya existido, le da a la
creencia en su divinidad de un enorme empuje. Si por otro lado las evidencias
son pocas o nulas, para esta existencia, este mito, en lo esencial, se derrumba
sobre sí mismo. Por lo menos para aquellos, que creen que Jesús fue una persona
real, quien actuó en Palestina. Esta es la razón por la cual los cristianos
están tan obstinados por pruebas que demuestren la existencia histórica de Jesús,
y por qué los de Bert Ehrmans, que refuerzan una historicidad cómo esta, se convierten
en éxitos de librería.
Las
evidencias ‘0para la persona Jesús, cómo todos sabemos, son extremadamente precarias.
Por esto, este terma es arduamente discutido por los eruditos, dónde los místicos
(que niegan, que la figura de Jesús se basa en un personaje histórico) se
enfrentan a los historicistas, que de hecho niegan la divinidad de Jesús, pero
que están convencidos, que el mito de Jesús se basa en una predicador del fin
del mundo real, que realmente vivió en aquellos tiempos.
Mientras
más me ocupo con estas pruebas para la existencia histórica de Jesús - y no soy ningún experto en esta materia – tanto
más dudo de ellas. Si, pudo haber existido ¿pero dónde esta las pruebas?
Hasta
donde yo puedo ver, sólo existe en las sagradas escrituras: en el Nuevo testamento.
Parece que no hay fuentes
confiables fuera de la biblia, que confirmarían la existencia de una persona
parecida a Jesús. No existen reportes de contemporáneos sobré su vida o su
actuar, aunque deberian existir, si se piensa en la cantidad de personas, que
en esta zona del medio oriente anotaban cosas (entre otras cosas los sismos, la
rajadura del velo del templo y el levantamiento de los zombis-santos de sus
tumbas durante la crucifixión). Todos los
informes provienen de décadas o siglos después de la supuesta muerte de Jesús –
de una época en la cual posiblemente comenzó a formar se este mito, y a ser no
en relación a una persona concreta. En comparación: Tenemos evidencias históricas
para la existencia de personas cómo por ejemplo, Julio Cesar, informes de contemporáneos,
estat8ias y monedas con su retrato.
Hasta dónde
puedo divisar, existen dos tipos de “evidencias” para un Jesús histórico: En
primer lugar es descrito en la Biblia (Cómo también Noé y Moisés), y en segundo
lugar las personas creen, que un mito necesariament5e debe basarse en un
personaje histórico. La primera evidencia la considero insatisfactoria y la
segunda no convincente. Los mitos también se pueden formar sin personajes
históricos. ¿La leyenda de Paul Bunyan se basa realmente en un leñador, que tenía
un buey como mascota?-
Y sin
embargo dudas referentes a la existencia de un Jesús histórico son chocantes y ofensivas
para los cristianos. Una actitud escéptico en esta asunto es considerado como
una intención, para agraviar a los cristianos. Yo considero como justificado
dudas cómo estas. Nosotros en conversaciones con creyentes no deberíamos
admitir automáticamente, que Jesús haya existido en alguna forma corporal, ya
sea divina o no.
Con
esta larga introducción, quiero llamarla atención sobre un nuevo artículo de
Valeria Tarico, una psicóloga y escritora de Seattle, Washington, sobre
alternet: “5 razones, que hacen presumir, que Jesús nunca existió”.
Su artículo es corto y
vale la pena leerlo, lo recomiendo; no lo voy a resumir aquí, sino sólo mencionar
las cinco razones que Tarico describe en
detalle:
1.- No existe ninguna fuente secular del primer
siglo que documentan la existencia de una Yeshua ben Josef.
2.- Los primeros autores del Nuevo Testamento parece no haber tenido conocimientos
mayormente ex catos sobre la vida de Jesús; los detalles se cristalizaron recién
en textos posteriores.
3.-. Los relatos del Nuevo Testamento no reivindican para sí, ser un relato de primera
man
4.- Los evangelios - nuestros únicos
reportes sobre un Jesús histórico – se contradicen.
5.- Eruditos actuales, que afirman sobre sí mismos, haber descubierto al
verdadero Jesús histórico, nos dan descaradamente diferentes relatos sobre su
persona.-
La autora también muestra una sorprendente cita de
Bart Ehrman – quien defiende la concepto, que hubo un Jesús histórico:
“¿Qué dicen los autores paganos, que vivieron en la
misma época que Jesús, sobre él? Nada. Tan raro que nos parezca, ninguno de sus
contemporáneos paganos jamás lo mencionaron. No existe un certificado de
nacimiento, no existen actas del proceso, no existe un acta de fallecimiento; no hay manifestaciones de interés, no
hay vehementes calumnias, no hay menciones vocacionales – nada. Si ampliamos
nuestra visión a los años posteriores a su muerte - incluso si observamos todo
el primer siglo de nuestra era – no encontramos ni una sola referencia sobre Jesús
en una fuente no cristina y tampoco no judío. Quiero destacar, que disponemos
de una gran cantidad de documentos de aquellos tiempos – por ejemplo obras de
poetas, filósofos, historiadores, científicos y autoridades, ni hablar de las
grandes colecciones de escrituras sobre piedras, como cartas privadas y documentos
jurídicos en papiro. Ni uno solo de estos innumerables escritos conservados,
mencionan el nombre Jesús ni una sola vez”
¿Si esto realmente es un cita autentica de Ehrman y
que no fue sacada de contexto, por qué afirma con tanta seguridad que hubo un
Jesús histórico?
Anexo
Muchos
de mis lectores escribieron en sus comentarios, que aquí se trata de una
trivialidad: ¿Por qué para alguien sería de interés, si realmente existió el Jesús
histórico? Yo pensaba, que la respuesta sería
evidente, y doy a conocer aquí lo que escribió un comentarista:
“Suceden
tantas cosas en la filosofía cristiana en el argumento autoritario, que la no existencia
de Jesús simplemente la destruiría. Pues entonces no sería más sólida que la
filosofía de la Ilíada o la Eneida.”
La
pregunta es importante. Porque una de las religiones más grandes del mundo
depende decisivamente de la afirmación, que
hubo un Jesús histórico, lo que en principio debería ser comprobable (basando
se en esto viene adicionalmente, la afirmación de la divinidad del susodicho Jesús)
A veces me parecer, que las personas dirían: “¿A quién le importa?” sufren de
una especie de síndrome YKCD (https://xkcd.com/386/). ¡A millones de cristianos si les
importa!.
Traducción:
Daniela Bartl
Traducido
del alemán por as. Gundelach
2 comentarios:
Hay una serie de autores que afirman tener serias razones, de enorme peso, para sostener la existencia histórica de Jesús, y mucho más que la hipótesis contraria, la cual ha perdido actualmente un peso específico en la investigación. El 99 % de los que hoy estudian a Jesús y el cristianismo primitivo, independientemente de su adscripción religiosa, o a ninguna, de su pertenencia a una escuela de investigación, o a ninguna, sostienen sin lugar a duda alguna que la respuesta a la pregunta “¿Existió Jesús realmente?” es un rotundo sí.
Entre estos autores se encuentran Antonio Piñero, Fernando Bermejo, Lautaro Roig Lanzillotta, Jaime Alvar, Jesús Peláez, Gonzalo Puente Ojea, Gonzalo del Cerro, Víctor Mora Mesén, Pablo C. Díaz.
Una vez aceptada la existencia histórica de Jesús como base imprescindible para explicar el cristianismo y su entorno, respecto a los llamados criterios de autenticidad debe decirse que existe un cierto y notable consenso entre los investigadores, confesionales o no, acerca de que el uso razonable y conjunto de los criterios de “dificultad y coherencia”, unidos sin duda también al de “atestiguación múltiple”, ha ayudado a obtener datos seguros que permiten afirmar la figura histórica de Jesús de Nazaret.
Otra cosa es la interpretación que de su figura y misión se haga. La mayoría no tienen problemas en aceptar a Jesús como un referente existencialmente real, auténtico y razonablemente datable. Pero donde tienen problemas es en aceptar a Jesús como un referente sobrenatural y divino. La escuela mitista ha fundido estos dos niveles hasta perder de vista la historicidad existencial de Jesús y del movimiento mesiánico que impulsaba. Las tesis de los mitistas -A. Drews o M. Onfray, p.ej.- son inverosímiles, exorbitadas y exageradas, complican en extremo la explicación de ciertos “hechos brutos” (bruta facta). Las soluciones alternativas sobre la existencia de Jesús propuestas por F. Carotta y Ll. Pujol son igualmente inverosímiles.
Siempre vamos a encontrar personas, que supuestamente presenta buenos argumentos que podrían demostrar la historicidad de Jesús. Pero siempre se trata de apologistas cristianos. Si queremos confirmar algún evento histórico, debemos estudiar todos los aspectos sobre este evento y no sólo aquellos confirman nuestro deseo que ese evento sea cierto.
El problema es que no existe ningún texto que fue escrito durante la supuesta vida de Jesús. Y ninguno de los que escribieron sobre Jesús, fueron contemporáneos de él.
Los cuatro evangelistas denotan un alto grado de intelectualidad, debido a sus conocimientos del griego, su gramático y sintaxis. Mientras que los primeros cristianos, eran personas sencillas, pastores, labradores, etc., de la zona de Galilea y alrededores, sin mayor educación, que hablaban arameo, seguramente analfabetos, ya que a la sazón los que dominad la escritura eran muy pocos.
Muchos expertos creen que el verdadero creador del cristianismo fue Pablo, que si hablaba griego y sabía escribir. Intelectualmente muy superior a los apóstoles.
Por lo menos el Jesús descrito en los evangelios nunca existió.
Publicar un comentario