29 de mayo de 2015

No existe ningún dios



No existe ningún dios

Desde que el ser humano ha comenzado a creer en seres sobrenaturales cómo dioses, ni uno solo ha logrado demostrar que el dios en al cual ha creído o cree, existe. Ni los más conspicuos teólogos de todas las épocas y  religiones lo han logrado.

Tampoco algún dios se ha revelado de tal manera que no quede la más mínima duda de su existencia. No lo hicieron los antiguos dioses egipcios, griegos, romanos. Tampoco los dioses mayas, incas y aztecas, hindúes y germanos. Tampoco lo hizo Alá ni Yahvé.

Los teólogos cristianos, para justificar la débil revelación del dios de la biblia, afirman que este dios quiere que se crea en él por fe. ¿Cómo lo saben? ¿Él se lo dijo?


Cuando los representaste auto nombrados de estos dioses, dicen saber lo que ese dios quiere y lo que no quiere, siempre es sospechoso. Porque en el fondo no es otra cosa, que estos personajes quieren imponer sus propios deseos y preceptos como si fuese la voluntad del dios que dicen representar e interpretar. Sin embargo cuando estos teólogos se enfrentan con cuestiones adversas, por ejemplo cuando se quema una iglesia con decenas de personas adentro, entonces los designios de ese dios son insondables, o sea no saben lo que ese dios quería.


Los teístas en general, para cada caso tienen una explicación; la mayoría son dogmáticas. Ahora para saber con seguridad, si una declaración es cierta, habría que conocer todas las posibles  consecuencias. Puesto que por razones prácticas esto es imposible, no se puede saber si una declaración es cierta. Con esto queda refutado cada dogmatismo.


Con todos los avances científicos actuales, donde los astrónomos han fotografiado lo más profundo del cosmos, han logrado descubrir el eco del Big-bang; el boson de Higgs, o sea lo que hace que una partícula obtenga materia. Donde los biólogos y bioquímicos han logrado desentrañar lo más profundo de la transición genética; donde los científicos han logrado colocar una nave espacial en un cometa, etc. En ningún momento se ha evidenciado la existencia de una divinidad, ni siquiera la necesidad de que exista un dios.
Después de miles de años de la búsqueda de pruebas de la existencia de un dios, los resultados han sido nulos, no existen pruebas de la existencia de ninguna divinidad. Es una pérdida de tiempo y energía insistir en la búsqueda de algo que no existe. 

Todos los argumentos que alguna vez se han esgrimido para demostrar la existencia de Dios, cómo el argumento cosmológico, el argumento de la ley moral, el argumento teleológico, el argumento ontológico; la apuesta de Descartes; las cinco vías de Tomás de Aquino, entre otros argumentos, todos han sido repetidamente refutados por los más diversos científicos y filósofos.

Después de tanto tiempo de investigaciones científicas y elucubraciones filosóficos, no se ha llegado a demostrar ni siquiera en forma plausible la existencia de un dios.
A la única conclusión que se puede llegar es, que no existe ningún dios.

 


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