12 de junio de 2015

Un teísta me pregunta



 Un teísta me pregunta

En relación a un comentario sobre  un artículo titulado “Creación vs. Evolución” aparecido en http://www.amistadencristo.com/, el señor C. A. O me plantea una serie de preguntas, que las voy a responder una por una, de acuerdo a mis conocimientos.
¿Acaso no sabe el lector, que si existe un reloj es porque antes ha habido un relojero que lo ha creado?
R: Aquí claramente se hace referencia a la analogía que presentó William Paley.  Paley compara el reloj con el universo por la complejidad del mecanismo. Pero por experiencia sabemos que un reloj es fabricado por hombres, incluso conocemos al inventor del primer reloj portátil, se trata del cerrajero alemán Peter Henlein
(1479-1542).
Un reloj es un artefacto, un objeto artificialmente hecho por un ser humano, También podemos reconocer como artefactos objetos mucho más primitivos, cómo una punta de flecha de piedra, los restos de un muro, o  fragmentos de alguna cerámica antigua. Mientras que las plantas, por ejemplo, son productos originados por la naturaleza.

                                        
¿Que cualquier obra que encontramos en este mundo, ya sea literaria, de ingeniería, de arquitectura, etc., existe porque ha habido alguien –escritor, ingeniero, arquitecto, etc.– que la ha escrito, inventado, diseñado, formado, etc.?
R: Aquí vale lo mis que lo arriba expresado.


¿Puede acaso el Universo mismo, y todo cuanto existe en él, lo visible e invisible, haberse formado por generación espontánea?
R: El señor Aracil asume, que los ateos – debería decir los científicos – afirman que el universo se originó por generación propia. Esto es totalmente falso, ningún científico ya sea ateo o no, jamás ha afirmado esto.


 ¿Puede salir de la nada algo?
R: A pesar de que esto lo he aclarado repetidas veces, lo haré de nuevo. “Nada” es un concepto abstracto, y lo abstracto no tienen consistencia propia, no existe, es sólo un concepto.


 ¿Puede la materia y el espíritu crearse a sí mismos?
R: Sabemos cómo se formó la materia. Los espíritus no existen.


Suponiendo que el Universo entero fue creado por una gran explosión –lo que los científicos han convenido en llamar el “big bang”– que sucedió en un determinado punto del tiempo ¿qué fue lo que explosionó y con qué propósito?
R: La expresión “Big-bang” proviene del astrónomo británico Fred Hoyle
 quien desarrollaba el contra modelo de un “Steady-state” universo, que se encontraba en un equilibrio dinámico: Constantemente y en todas partes se crea nueva materia en el universo, por esto el supuesto estado inicial de Gamow y colegas, no era necesario. Hoyle, en un programa radial, llamó a este estado inicial burlonamente como “Big-bang” – y con esto, involuntariamente le dio un nombre al modelo de la competencia.
Lo que realmente sucedió fue una inflación exponencial de algo, que los astrónomos llaman una singularidad.  Y esto no sucedió en un determinado punto del tiempo, ya que el tiempo apareció junto con el universo. El Big-bang es el inicio de todo, preguntar si hubo algo antes es un absurdo.

¿Por qué explosionó?
 R: Nunca hubo tal explosión, le que hubo fue una inflación exponencial de algo, que los astrónomos llaman una singularidad.


¿Es la materia eterna y preexistente a todo?
R: No, la materia cómo tal se formó 380 000 años después del Big-bang, cuando el universo se transparentó y las partículas subatómicas pudieron moverse libremente en el espacio, que al colisionar entre sí, originaron los primeros átomos que era el Hidrógeno.


 ¿Puede algo inerte tener propósito, proyecto, inteligencia, etc.?
R: La naturaleza no tiene un propósito.  Somos los seres humanos que nos fijamos un propósito individualmente y son los seres vivientes que tienen inteligencia en menor o mayor grado.


 ¿Cómo una auto-explosión podría generar vida inteligente?
R: Reductio ad absurdum

¿De dónde surge la vida?
R: Aun no se sabe a ciencia cierta, pero existen algunas hipótesis.


 ¿Acaso surge de la materia?
R: Si. Los materiales fundamentales para la existencia de vida son moléculas orgánicas, cuya presencia se ha descubierto en todo el universo. Los principales elementos para la generación de vida son el carbono, hidrógeno, oxigeno, nitrógeno, los elementos fundamentales de la química orgánica.


 Y, entonces, ¿quién creó la materia capaz de generar esa vida?
R: No es quien, sino no cómo y esto ya lo expliqué arriba

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 ¿Quién ordenó los átomos, protones, neutrones, etc., que forman la materia y las distintas cadenas de ADN que componen las células de los seres vivos, conteniendo información para los distintos tipos de vida mineral, vegetal y animal?
R: Aquí el señor C. A. O. presume que hubo o hay un ente sobrenatural, que ordena que ciertos elementos reaccionen entre sí, olvidándose que existen fuerzas y leyes naturales que hacen que la materia interactúa. Por ejemplo, determinados compuestos químicos, si entran en contacto, automáticamente reaccionan entre sí.


¿Qué o quién proyectó el ADN conteniendo las leyes de los distintos tipos de vida?
R: Nada ni nadie. La naturaleza dispuso de unos 3 millones de años para crear el ADN.


¿Fue todo producto de una azarosa evolución?
R: No de una evolución azarosa, sino de una evolución sujeta a las leyes de la naturaleza.


¿Tiene inteligencia la evolución?
R: No, tampoco una meta, un propósito, etc.

 
¿Cómo la evolución pudo, partiendo de la nada –o, si se quiere de la micro o nano materia, o de la simple expresión de la vida, que como no soy científico, ignoro exactamente si estriba en una proteína, aminoácido, bacteria, animal unicelular, etc.–, ir transformándose de lo simple a lo complejo, hasta llegar, al ser humano, cumbre de la creación, o de la “evolución” para el que quiera ejercer fe en la misma?
R: Las primeras sub partículas atómicas formaron los átomos (ver arriba). Los primeros elementos en formarse fueron el hidrógeno, el helio y litio, luego a causa de la fusión atómica en los núcleos de las estrellas se formaron los demás elementos.  Los elementos básicos para la vida son el Carbono C, el Hidrógeno H, el Oxígeno O y el Nitrógeno N, elementos que formaron los aminoácidos que son las bases de las proteínas. 


¿Cómo la evolución pudo prediseñar cada tipo de vida y cada especie existente?
R: La evolución no, pre diseñó nada. En la naturaleza no existe  diseño alguno, sólo cambios, si sirven sobreviven si no, desaparecen.


 ¿Cómo fue capaz la evolución de formar los órganos tan complejos de los seres vivos?
R: A partir de sistemas simples. Por ejemplo el ojo se desarrolló a partir de unas células sensibles a la luz hasta llegar a los  ojos del ser humano y la complejidad de los ojos de los insectos, proceso perfectamente conocido.


¿Lo hizo a tientas, formando una parte de los mismos hace millones de años, y a lo largo de esos millones hasta que ya quedó todo perfectamente evolucionado, fue completando y perfeccionando poco a poco dichos órganos vitales para la vida?
R: Aquí hay un enorme desconocimiento de lo que es la evolución. Aquí el autor de este artículo presupone que hay un proyecto detrás de cada cosa. La naturaleza no conoce proyecto alguno. En la naturaleza no existe la perfección. Por ejemplo, el ojo humano dista mucho de ser un órgano perfecto. Además la evolución es u proceso continuo, no es que el ojo evolucionó y ahí quedó – es imposible saber cómo y sí el ojo sigue evolucionando con el tiempo.


 Si así fue ¿cómo pudieron realizar ciertos órganos su función durante millones de años de evolución hasta que la “sabia” evolución logró completarlos?
R: Primero debo decir que no fue así cómo lo piensa en señor Aracil. Volviendo al ejemplo del ojo, existen en la Internet una serie de artículos relacionados con la evolución de este órgano. Este ejemplo también se puede aplicar a otros órganos. La “sabia” evolución no completó nada en absoluto.


¿Cómo lograron sobrevivir las especies si sus órganos estaban a medio formar hasta que la misma “evolución” pudiera completarlos y perfeccionarlos?
R: Aquí hay otro error de comprensión de la evolución. No es que un ser haya  existido con medio ojo. Todas las plantas tienen células sensibles a la luz, ellas no han desarrollado ojos, porque no les son necesarios. Pero otros seres, para poder alimentarse necesitaban detectores de movimiento y comenzaron a desarrollar un órgano capaza de detectar movimientos, con el tiempo desarrollaron órganos cada vez más complejos. Y cómo ya los dije, en la naturaleza la perfección no existe.


Mientras eso se produjo ¿estarían, por ejemplo, ciegos todos los animales, y humanos?
R: ¿Señor A., me quiere agarrar para el hueveo, cómo decimos en Chile?


Si la experiencia y la ley de la Entropía –que afirma que todo tiende a empeorar– demuestran que nada va de peor a mejor ¿cómo es posible creer que la evolución sea tan poderosa e inteligente para que todo se perfeccione constantemente?
R: Ni la experiencia ni la ley de la entropía dice que todo tiende a empeorar. Esta afirmación es totalmente falsa. Tampoco nadie dijo que la evolución es inteligente. Evolucionar en el fondo no es otra cosa que desarrollar. 


¿Y qué diremos del cerebro humano, formado por millones de neuronas, y su complejo sistema nervioso de miles de ramificaciones que se distribuyen por todo el cuerpo? ¿Cómo la evolución partiendo de la materia puede llegar a formar el espíritu y al alma, es decir, a la vida?
R: El cerebro de los primeros homínidos como el australopiteco tenía un volumen de aprox.. 530 cc. En la actualidad es de aprox. 2000 cc.  Es algo complicado referirme aquí en breves palabras sobre la evolución del cerebro, pero pronto publicaré un  artículo al respecto.
La teoría de la evolución biológica, conocida actualmente como la teoría sintética de la evolución, no trata sobre el origen de la vida, sino sobre el origen de las diversas especies vivientes. Conceptos cómo espíritu y alma no son contemplados en las ciencias naturales, esto es netamente teológico.


Por poner un ejemplo ¿cómo la evolución pudo diseñar los órganos visuales de los animales y del ser humano, si esto lo hizo poco a poco durante millones de años?
R: Ya explicado arriba.

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Si esto fue así ¡Es admirable el poder y la sabiduría de la evolución! ¡Sigamos y adoremos al dios “evolución, porque él seguro que nos salvará de la extinción y de la muerte!
R: Pero no fue así, cómo cree el señor A. Que él siga adorando al energúmeno descrito en la biblia. Yo no adoro a ningún dios, ente o cosa.


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